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martes, septiembre 27, 2011

La paradoja de la enfermedad de la compulsión por la comida

Para que seguir haciendo lo mismo si me lleva siempre al mismo sitio. Hacer dieta es para mi peligroso como comedor compulsivo. Pensar como una persona normal, dejarme llevar por mis defectos de carácter también. Yo no puedo vivir como los demás, por que eso me lleva a recaer en la comida y comer compulsivamente. Yo tengo que vivir de una manera distinta, que me de paz y serenidad. Tengo que cuidar de mí, de mi alimentación, de mis horarios, de mis emociones y de mi vida espiritual. Por ejemplo: Yo llego y me voy a mi hora del trabajo. Mis compañeros están allí eternizados. Yo no me puedo permitir ese detalle. Es un límite que le pongo a la empresa. Demasiado stress a mi me hace daño. Si yo no puedo con la enfermedad, alguien podrá, vamos a buscarlo juntos. Cree en que puedes encontrar el camino para salir de la enfermedad aceptando la ayuda que te ofrecen, o vuelve a vivir en el infierno de la comida compulsiva, caminando lentamente por un valle de lágrimas hasta un triste final. Esa es la elección que tuve que hacer cuando llegue a Oa. A nivel consciente es muy fácil, pero a nivel inconsciente, manda la enfermedad. Muchas veces quiero recuperarme pero mi mente no me deja. Es como estar en lucha conmigo mismo. Es la misma lucha de comer algo que en el fondo no quieres comer y que te sienta fatal. Esa es la paradoja de la enfermedad.

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domingo, septiembre 18, 2011

la necesidad de tener una mente abierta y por que es esencial para mi recuperación

La mente abierta es esencial para que entre en la cabeza la idea de que la recuperación es posible. Es necesario salir de la mentalidad del atracón, de me duele y como, y entrar en una nueva manera de pensar que me permita vivir sin comer. A mi cuando mas admito mi enfermedad mas liberado me siento, por que ya no soy culpable de todos los impulsos enfermos que tengo. Ya no tengo que hacer nada con ellos, ni lucho tratando dejando de sentirlos. He aprendido que hay una manera de encaminarlos con el uso de las herramientas. Estuve dispuesto a escuchar y tuve mi mente abierta para probar otros caminos para salir de la compulsión por la comida. Tener la mente abierta es estar dispuesto a aceptar nuevas ideas sobre el proceso de la compulsión por la comida en mi cabeza. Estar dispuesto a escuchar que no todo tiene por que terminar en un atracón y se pueden hacer otras cosas antes que comer compulsivamente. Estar dispuesto a escuchar, a obedecer y a hacer lo que te digan por que ese es el camino de la recuperación, cuando antes los comedores compulsivos como yo siempre hemos sido rebeldes e individualistas que pensábamos que nosotros sabíamos lo que era lo mejor para nosotros, y no lo sabíamos. Nuestro camino nos llevaba a comer compulsivamente. Ahora es el momento de abrir las orejas y escuchar la manera de aquellos que se han recuperado. Tener la mente abierta significa estar dispuesto a escuchar el camino de la recuperación que otros han recorrido antes que yo, y estar dispuesto a recorrerlo yo también.

miércoles, septiembre 14, 2011

No existe una solución a medias

Lo dice la introduccion “andarnos con medias tintas no nos sirvio de nada”. La recuperación exije de mi que sea mejor persona, que crezca interiormente, que deje de lado esas partes de mi que me hacen daño y me hacen comer compulsivamente. Es decir, los defectos de caracter. Muchos pasos lo dicen: “estuvimos dispuestos”. Es necesario tener la buena voluntad de querer curarse. Por eso el programa no funciona con las personas que vienen obligadas a los grupos por sus familiares o doctores. Tienes que quererlo, y solo asi estaras enteramente dispuesto. Si hay en mi mente un solo resquicio de que creo que hay otra manera entonces el programa no funciona. En el fondo es una cuestion de fe en el programa, fe en la recuperación. Nunca nadie me dijo nada sobre lo que tenia que creer en Oa. Solo me dijeron cree en que te puedes recuperar, y ten esperanza. Y luego me enseñaron ejemplos. La fe mueve montañas, y cura a los adictos: comedores compulsivos, alcoholicos, sexolicos y drogodependientes. Todos hemos usado el programa de doce pasos para recuperarnos, pero poniendo todas las cartas sobre la mesa. A veces se requiere un tiempo para estar totalmente convencido de que este es el camino. Yo mismo lo necesite. Muchas personas no terminan de creer en el programa o no estan dispuestas a trabajar todo lo que hace falta, y se van. La puerta esta abierta y nadie obliga a nadie. Solo funciona si te quedas y trabajas voluntariamente. Por eso cada uno de los que estamos en recuperación somos un milagro cada uno de nosotros. Otros necesitaran mas tiempo y que la enfermedad les enseñe a desear mas el querer recuperarse. Por que en el fondo es la compulsion por la comida, el horror de comer compulsivamente en activo, a mi por lo menos me ha enseñado a no querer volver a pasar por ahi. Y entonces puedo decir que para mi recuperacion, la compulsion por la comida fue mi maestra, por que me enseño a querer recuperarme. Y por eso no hay que arrepentirse del pasado ni ocultarlo, que es una de las promesas del programa, y hay tantos pasos que trabajan sobre lo que hemos vivido.

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domingo, septiembre 11, 2011

Fe y compulsion por la comida


Yo soy de los que creen, aunque a veces me cuesta acordarme de rezar o de meditar. Y creo por que he comprobado la influencia de dios en mi vida a traves de los muchos regalos que me ha dado oa en mi vida. Milagros como el dejar de comer compulsivamente y que la comida dejara de tener poder sobre mi, y que la obsesion con el fisico y la comida se mitigaran o desaparecieran.

Fueron los pequeños milagros uno tras otro los que me hicieron creer y tener fe. Antes de entrar en oa habia vivido una vida de tristeza y depresión. El milagro de ponerme un pantalon que no me valia y que me cierre. Que este dias y dias sin darme un atracón. Que vea comer a otras personas mis alimentos compulsivos y no sienta nada. Que me desaparezca la obsesión por la comida. Que pueda asistir a eventos o viajes que alteran mi plan de comidas o mi rutina diaria, y siga estando abstinente.

Yo creo que actualmente estoy en lo que llaman una gorda serenidad. Estoy abstinente, pero no estoy seguro de si estoy perdiendo peso o no. Primero que esto no me importa, al menos no tiene la importancia que tenia antes que era para mi una obsesion. Y segundo que la bascula dice una cosa la ropa dice otra. Asi que como yo no alcanzo a ver que pasa con mi cuerpo, ni lo controlo, he pensado que es un asunto de dios, se lo dejo a el. Yo solo puedo seguir estando abstinente, trabajando el programa, y dios y el tiempo dira.

En oa muchas veces la fe es una cuestion de peso y de dejar de comer compulsivamente. Empezamos a creer no por que nos digan que hay que hacerlo. Yo empeze a creer cuando vi que el programa funcionaba, y que con su ayuda, podia parar de comer compulsivamente, y en consecuendia mantener un peso saludable sin esfuerzo, cuando antes no podia. Muchos que no lo logran, o no ven los ejemplos, no logran alcanzar esa fe y se van. O no logran ver que tiene que ver dios con la comida. O simplemente son tan cerrados de mente que no quieren escuchar hablar de dios, nos llaman secta, y se van.