abstinencia, trabajo diario, felicidad y plan de comidas

Hay muchas personas que conociendo el programa de recuperación de doce pasos no pueden seguirlo. Conocen la luz de la recuperación y no son capaces de entregarse a ella. “El programa se me hace tan cuesta arriba, me cuesta tanto…” dicen.

Cuando escucho que el programa cuesta mucho, parece que da la imagen de que el programa y la abstinencia es un sacrificio y un esfuerzo, de que lo tienes que hacer tu y que necesita todo tu esfuerzo y empeño y voluntad, y que no puedes.

Error.

Mientras una persona siga creyendo que la abstinencia es una cuestión que ha de hacer a la fuerza, seguirá recayendo una y otra vez. Esta es mi humilde opinión.

La abstinencia no sale así por que si por que nosotros queramos, si no por que llevamos nuestra mente y nuestra vida diaria a un punto que como resultado de vivir así nos da la abstinencia.

La abstinencia es resultado de rendir nuestra voluntad y nuestras vidas con la comida y con todo lo demás.

Es decir, no puedo con la comida, soy impotente, no lucho mas, comida tu has ganado, no puedo controlare, voy a dejar de luchar contigo comida por que tu siempre ganas.

Cuando llegue a comedores compulsivos anónimos a mi la abstinencia me parecía inalcanzable un misterio que solo unos pocos privilegiados tenían a su alcance. Hoy día se que:

La formula para dejar de comer compulsivamente para mí es la siguiente:

Plan de comidas + buena salud emocional + trabajo del programa = abstinencia

Cada uno creo que deberíamos ver cual es el factor que nos falla. Con honestidad. Pensarlo bien. Y ponerle remedio.

Yo el plan de comidas y los agradecimientos, llevo el registro en una agenda por que así puedo ver la evolución de cómo voy comiendo, y si no se que comer tiro del plan de comidas de días pasados. Los agradecimientos acaban siendo un diario de cosas buenas, y al leer los de meses atrás puedo saber que ha ido pasando en mi vida. Pero el efecto final que se busca es el de tener una actitud agradecida ante la vida, de disfrutar las pequeñas cosas que las personas normales no aprecian.

Se trata de empezar a ser mas feliz y no necesitar la muleta de la adicción. Muchas personas (yo me incluyo) usan o han usado la comida como anestesia, como sedante, para no sentir nada frente a una vida llena de dolor y sufrimiento.

¿No seria mas fácil vivir de una manera tranquila y así no necesitar la anestesia sedante y autodestructiva de la comida? Que es una mentira, por que te tranquiliza en el momento, pero luego lo que hace es destruirte con kilos y crearte mas angustia, falta de autoestima y dolor. Tal como yo veo el programa se trata de aprender a vivir sin comida, de un nuevo modo de vida mas pleno y feliz.

El programa de recuperación, mo es cuestión de apetecer o no apetecer. A nadie le apetece tener que asistir a grupos de terapia, ni trabajar su interior, a nadie le apetece estar enfermo y tener un trastorno de la alimentación.

A mi por supuestisimo que no me apetece ni trabajar el programa, ni ir a reuniones, ni hacer servicio, ni hacer plan de comidas ni agradecimientos, ni si quiera me apetece ser comedor compulsivo. Un sábado por la tarde se me ocurren mil sitios donde estar mejor que en una reunión. Pero es lo que hay y tengo que hacerlo. Por la cuenta que me trae. Por que se que soy comedor compulsivo y va en mi supervivencia y calidad de vida el hacer estas cosas o no hacerlas. Ya probé a vivir sin hacerlas, vivir sin programa, y me fue francamente mal. Mi vida con programa es mucho mejor, así que como se que es mi salvación, Asi que yo no decido, pase lo que pase lo hago.

Me costo año y medio de programa y varias recaídas, admitir que tenia que hacer un plan de comidas.

Muchas compañeras al principio comen siempre igual por que les resulta mas fácil no tener que decidir sobre que comer. Comen siempre igual, sota caballo rey, y es lo que hay, se lo hacen fácil. Así no hay grieta posible por donde se pueda colar una mala elección con la comida, ya que nuestro libre albedrio para tomar elecciones con la comida esta infectado por la comida y por eso siempre queremos lo que queremos. Alimentos compulsivos.

Yo creo que cada uno debe buscar una manera de comer que le haga sentir tranquilidad y paz, pero que no deje hueco a decidir en el momento que comer, si no que lo decida con antelación. Así se evita tener que decidir a puerta de nevera abierta que comer, que es donde nos suelen surgir las tentaciones. Y luego se puedes escribir a posteriori que has comido realmente, sin culpas ni preocupaciones, para ver que ha variado de tu plan de comidas original.