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miércoles, octubre 04, 2006

el finde que visite el mundo magico...

Fin de semana de infarto, pero que ha salido bien. Gracias a dios.

Estuve a punto de no ir, pero al final solté riendas. Decidí no huir de la comida. Por que no se puede estar toda la vida huyendo.

El problema laboral que me estaba quitando la serenidad, se ha solucionado tengo nuevo trabajo. Con seguridad, mejor sueldo, mejor horario, mejor combinación. Pero he de tener cuidado. Para no caer en el acomodamiento ni implicarme demasiado con los compañeros. Que parecen su propia camarilla, y son como algo “arpias”. Un corrillo al que no quiero pertenecer.

Así que en cuanto salí del trabajo agujero a este nuevo trabajo volvió la serenidad. Es increíble como mi estado en el trabajo me hacia ir resbalando. Así que para mi abstinencia he de trabajar bien, para cuidar que me vaya bien en el nuevo trabajo y así estar en paz conmigo mismo y que mi jefe no me haya de echar ninguna bronca. Es un compromiso que me he hecho conmigo mismo.

Además concentrarme en lo que hago me ayuda a olvidarme de la comida. Ser productivo para mi ahora es estar abstinente.

El fin de semana ha sido increíble. Y pensar que no quería ir. Puedo viajar sin huir de la comida, pero he de prepararme, tomar mis armas espirituales. Me lleve mi comida y salve asi situaciones. Y pude ver todas aquellas tentaciones y salir indemne de ellas, lo que me fortaleció. Me ayudo hablar con la chica de Cáceres, para terminar haciendo un paso 12 en toda regla, regalándole mis libros de oa. Y luego la comprensión de una amiga que sufrió anorexia. Horas hablando de mi problema, casi sustituyo a una reunión.

Me encanto el detalle del cocinero preguntadote que quería comer, y las señales que últimamente he tenido del ps. Los resbalones han quedado atrás.

Solo hubo un momento que sentí tirón (ansia por comer) y lo salve comiéndome una pera y se me paso.

Tanta comida rodeándome, tanta chuchearía. Comí lo que debía y nada de esas cosas que se que me provocan atracones. La compulsión ha pasado. Los resbalones han cesado. Siento que el peligro de atracones se desvanece.

En el curro tienen siempre chuchearías y picoteo, pero se que la comida estará siempre ahí, que es mi elección o no comerla, y que si estoy mal me dará por comerla, así que he de trabajar para que mi trabajo hable por mi y nadie me tenga que echar una bronca. Tengo que cuidar de mi y de mis sentimientos

Además estoy escuchando cintas de un programa de 12 pasos de camino al trabajo y he aprendido mucho. Sobre todo que vivir la vida bien depende de mi, que la abstinencia es una actitud. Que no hay que darle a las cosas mas importancia de la que tienen.

Además las cadena de acontecimientos, las coincidencias, veo la mano de mi ps, ese dios autodefinido por mi como el destino que hace que me cargue mi pda donde escribo y leo sobre el trabajo, que me lleve todos mis libros de oa al viaje en vez de mi pda, y encima los regale como parte de un doceavo paso.

Simplemente alucinante.